El Govern aprueba el decreto para reabrir sus ‘embajadas’

La portavoz del Govern, Elsa Artadi, y el conseller de Exterior, Ernest Maragall
Las primeras serán las delegaciones de Reino Unido e Irlanda, Alemania, Italia, Francia, Suiza y los EEUU
Torra nombra a Meritxell Serret, prófuga de la Justicia española, como delegada del Govern ante la Unión Europea
El gobierno de Quim Torra aprobó ayer el decreto que permitirá reabrir las «delegaciones» en el Reino Unido e Irlanda, Alemania, Italia, Francia, Suiza y los Estados Unidos de América, eliminadas a raíz de la aplicación del artículo 155 por parte del Gobierno español.
El Departamento de Acción Exterior, Relaciones Institucionales y Transparencia, dirigido por el conseller Ernest Maragall, aprueba así la primera fase para volver a establecer «embajadas» catalanas en el extranjero.
Maragall aseguró ayer que con este decreto «se ha puesto a navegar la nave de la acción exterior del gobierno» con el objetivo de «recuperar los derechos y libertades arrebatados y el avance decidido hacia la República catalana». También dijo que las embajadas actuarán en el exterior «con todas las consecuencias».
Durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Govern, el consejero advirtió de que la independencia catalana volverá a estar presente en la capital y las instituciones europeas. Y no sólo allí, porque la voluntad de Torra es que en los próximos seis meses haya más delegaciones en el exterior que la legislatura pasada. Los destinos de los nuevos «embajadores» catalanes serán Portugal, los Balcanes, los Países nórdicos, el Mediterráneo, Oriente Medio, los países asiáticos o Latinoamérica.
Según explicó el consejero Maragall, la acción exterior catalana se guiará por tres ejes claros: representación, presencia e influencia. «Tenemos que representar los intereses de Cataluña allí donde se toman decisiones», apuntó.
Tal y como contempla el decreto de reestructuración del Departamento, aprobado hace una semana, las delegaciones en el exterior quedan asociadas orgánicamente a la Secretaría de Acción Exterior y de la Unión Europea. El consejero Maragall avanzó que serán restituidos en su cargo los anteriores delegados en Suiza (Manel Manonelles); Alemania (Marie Kapretz), Reino Unido e Irlanda (Sergi Marcén), Italia (Luca Bellizzi), mientras que el anterior delegado en Francia, Martí Anglada, se ocupará de poner en marcha la delegación en los Países Nórdicos.
Sus principales funciones serán «facilitar las relaciones bilaterales con las autoridades de sus respectivos países, promover y coordinar las relaciones de colaboración de la Generalitat y sus órganos adscritos con organismos internacionales con presencia en sus respectivos territorios y que tengan interés relevante para Cataluña».
Si todo esto es «anómalo» más aún lo es el nombramiento de Meritxell Serret como delegada del Gobierno ante la Unión Europea. Serret está actualmente fugada en Bruselas y Torra le ha encargado asumir la delegación del Gobierno ante la UE para reanudar la tarea de representación de Cataluña en la capital europea.