Baile de niveles de contaminación en Madrid Central
Según el Ayuntamiento de Martínez-Almeida, la contaminación aumenta en 19 de las 24 estaciones desde la puesta en marcha de Madrid Central hace 8 meses
Ecologistas en Acción sostiene que el segundo trimestre de 2019 ha sido el de más baja contaminación desde que se tiene registro
Madrid Central, el cierre al tráfico rodado del centro de la capital, está provocando una guerra de cifras en torno a los niveles de contaminación en la ciudad.
En plena fase de reordenamiento, la nueva corporación municipal de José Luis Martínez-Almeida quiere corregir los errores que se cometieron en el arranque del programa y ha aprobado una moratoria de las multas hasta septiembre.
La acción ya ha tenido su reacción. El lunes los ecologistas cortaron el tráfico en las principales vías de acceso a la almendra central de Madrid (470 hectáreas) en protesta por el paso de vehículos y tuvieron que ser desalojados por la fuerza pública.
Este miércoles el Ayuntamiento ha publicado un informe según el cual la calidad del aire ha empeorado en 19 de las 24 estaciones de medición de la red de la capital desde la puesta en marcha de Madrid Central, el 30 de noviembre de 2018. Hasta el pasado 18 de junio de 2019 y en comparación con el mismo período del año anterior el aire no ha mejorado en Madrid.
Indica el ayuntamiento que las estaciones en las que más se han elevado los niveles de NO2 son las de El Pardo, Casa de Campo, Plaza de España, Sanchinarro, Villaverde, Plaza Elíptica y Ensanche de Vallecas, la gran mayoría de ellas situadas en la periferia.
Como ha recordado en varias ocasiones el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, a la luz de los datos Madrid Central no ha servido para mejorar la calidad del aire. «Por ello, resulta más urgente que nunca replantear esta medida porque, no solo no funciona, sino que está resultando lesiva».
En este sentido, el Gobierno municipal considera que restringir el tráfico no es la única medida que debe tomarse para luchar contra la contaminación. Alternativas de transporte público y líneas de ayudas para la renovación de flotas son las propuestas.
Desde el otro lado de la barrera Ecologistas en Acción mantiene que el segundo trimestre del año en curso ha sido el de más baja contaminación desde que se tiene registro. Tras analizar los datos de contaminación registrados a lo largo de junio, la organización eco constata que este mes ha tenido también valores muy bajos de dióxido de nitrógeno, NO2, el contaminante por el que Madrid tiene abierto un procedimiento de infracción europeo.
«En el segundo trimestre del año (el único con el sistema de multas de Madrid Central funcionando al completo) se han constatado los niveles más bajos de contaminación por NO2, tanto en la estación de Plaza del Carmen (dentro del perímetro de Madrid Central) como en el valor medio de la red desde que esta comenzó a funcionar (enero de 2010)». Por ello, dicen, resulta tremendamente irresponsable que la corporación municipal suspenda esta medida.
Añaden desde Ecologistas en Acción que «los datos de contaminación correspondientes a junio de 2019 en Madrid fueron en general positivos en comparación con los registros de años anteriores y pese a ser un mes con un único día de precipitación. Los niveles de dióxido de nitrógeno registrados este año fueron inferiores a los de 2018 en 15 de las 24 estaciones de la red. En cuanto al valor medio de la red correspondiente al mes de junio de 2019, el registro alcanzado, 25 µg/m3 (microgramos de contaminante por metro cúbico de aire), fue el segundo más bajo para un mes de junio de los últimos 10 años».
Destacan los datos correspondientes a Plaza del Carmen, la única estación de la red ubicada dentro del perímetro de Madrid Central. En junio de 2019 registró 26 µg/m3, 12 menos (reducción del 32%) que el registrado en 2018 (38 µg/m3 ), y cuatro menos (reducción del 13%) que la medición más baja alcanzada en el mejor año del pasado. «Por lo tanto, un mes más, los niveles de contaminación por NO2 registrados en Plaza del Carmen en 2019, con Madrid Central en marcha, fueron nítidamente inferiores a los registrados en junio de los nueve años anteriores».
Asimismo, señalan los verdes que se produjeron también reducciones muy marcadas de los niveles de contaminación por NO2 en diversas estaciones en relación a los niveles medios de los años anteriores: 12 µg/m3 en Cuatro Caminos; 9 µg/m3 en Retiro; 8 µg/m3 en Escuelas Aguirre y 7 µg/m3 en Castellana y Plaza de Castilla. Las reducciones más modestas se registraron en estaciones periféricas de la red: 2 µg/m3 en Sanchinarro, Casa de Campo, El Pardo y Barajas Pueblo. En conjunto, el valor medio de la red experimentó una disminución de 5 µg/m3 (17% de reducción) respecto al valor medio de los nueve años anteriores.
«Un mes más los datos indican que no existe evidencia alguna del llamado «efecto frontera», puesto que no se detecta incremento de contaminación en las zonas aledañas al perímetro de Madrid Central. Al contrario, Madrid Central ha ejercido un «efecto contagio», ya que la tendencia clara tanto en junio como en todo el segundo trimestre es a una reducción generalizada de la contaminación por NO2 en toda la ciudad, más intensa en el perímetro de Madrid Central y las zonas adyacentes, y más modesta hacia la periferia», manifiestan.
Los ecologistas recuerdan que el sistema de multas a los vehículos infractores se puso en marcha el 16 de marzo, por lo que el segundo trimestre (de abril a junio) es el único completo con este sistema funcionando.
Y que «en definitiva, los datos muestran con nitidez una consolidación de los efectos positivos que Madrid Central ejerce sobre la calidad del aire, tanto dentro del perímetro de aplicación de la medida como en general en toda la ciudad, ya que los registros son claramente mejores que los correspondientes a los años anteriores».
Para Ecologistas en Acción, con estos datos sobre la mesa y teniendo en cuenta que la mala calidad del aire es la principal causa de mortalidad por motivos no naturales en la ciudad de Madrid, la suspensión de facto de esta zona de bajas emisiones mediante la retirada de las multas que ha consumado el nuevo Gobierno municipal es una gravísima irresponsabilidad de dramáticas consecuencias para la salud de la población.