Una investigación independiente culpa a China y a la OMS de la pandemia

El aún director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante una rueda de prensa en Ginebra (Foto. ONU-Eskinder Debebe)
Los expertos no se explican por qué no se usó el término ‘pandemia’ hasta marzo de 2020
‘Las autoridades sanitarias de China pudieron haber aplicado medidas de salud pública más contundentes en enero de 2020 y no lo hicieron’.
Una investigación independiente ordenada por la agencia de la ONU para la salud concluye que ‘durante una reunión celebrada el 4 de febrero de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó de que había más de 12.000 casos confirmados en China y sólo 176 casos en el resto del mundo, prueba definitiva de la existencia de transmisión de persona a persona y señal clara de la necesidad de actuar con rapidez para contener la propagación. Esa señal fue desatendida’, asegura el informe.
Según el análisis de la cronología de las primeras fases del brote, ni las autoridades chinas ni la OMS aplicaron el principio de precaución ante los primeros datos de transmisión de persona a persona y de transmisión asintomática y no emitieron las advertencias oportunas sobre esa transmisión entre personas.
El panel de expertos agrega que ‘ésta claro’ que el volumen de infecciones en el primer período de la epidemia fue superior al comunicado. Y también que las conexiones aéreas predecían la difusión mundial del virus durante la fase temprana de la epidemia.
‘Existen pruebas procedentes de Wuhan de que a finales de diciembre de 2019 ya había indicios de la existencia de un nuevo virus responsable de los casos de neumonía de origen desconocido’, incide el informe, que resalta que ‘es claro que las autoridades sanitarias de China no aplicaron’ en enero de 2020 las medidas de salud pública que la situación requería.
En este ámbito, los expertos tampoco se explican por qué el Comité de Emergencias convocado por la OMS no se reunió hasta el 22 de enero, ni tampoco por qué no ofreció una declaración de una emergencia de salud pública internacional en su primera reunión. No fue hasta el 31 de enero cuando lo hizo.
Al hilo de esto, los investigadores también se preguntan porqué la OMS no utilizó el término ‘pandemia’ hasta el 11 de marzo, algo que a todas luces habría alertado al resto de países a actuar ante la gravedad de un problema de salud de escala internacional. Los expertos señalan de fue el 30 de enero cuando se declaró la ‘emergencia’. Y añaden que ‘el grado en que los países respondieron a esa declaración no fue el esperado’. Pero no olvidan que es el término ‘pandemia’ el que habría puesto en guardia al mundo.
Por todos estos hechos y evidencias, la ex presidenta liberiana Ellen Johnson Sirleaf y la ex primera ministra neozelandesa Hellen Clark, que lideran el panel independiente que investiga la respuesta global a la COVID-19, afirman que es es necesario ‘reformar el funcionamiento de la OMS para evitar que la actual crisis sanitaria se repita’. Algo que ya expuso en mayo del año pasado el hasta este miércoles presidente de los EEUU, Donald Trump, cuando decidió romper relaciones con la organización por el ‘completo control’ que China ejerce sobre ella.