Un misil derriba un avión con 298 pasajeros al este de Ucrania
Un bombero observa parte del fuselaje del avión derribado (Foto: sp.ria.ru)
Un Boeing 777 de Malaysia Airlines que transportaba 298 pasajeros cayó ayer por la tarde en el este de Ucrania, cerca de la frontera con Rusia, en la región de Donetsk, donde desde hace meses se libran fuertes combates entre los rebeldes prorrusos y militares ucranios. La aeronave había despegado de Ámsterdam y se dirigía a Kuala Lumpur y según las autoridades de Kiev no ha habido supervivientes.
El Ministerio del Interior ucraniano asegura que entre el pasaje había 154 holandeses, 43 malasios, 27 australianos, 12 indonesios, 9 británicos, 4 alemanes ,4 belgas, 3 filipinos, un canadiense y 41 personas sin nacionalidad verificada.
Tanto las autoridades ucranianas como los rebeldes se responsabilizan mutuamente de haber sido los causantes de la tragedia. Según Anton Geráshenko, consejero del ministro del Interior de Ucrania, el aparato pudo haber sido abatido por un cohete tierra-aire lanzado por un sistema de misiles Buk de los insurgentes. Del lado separatista, el primer ministro de la autodeclarada república popular de Donetsk, Alexander Borodai, asegura que el avión fue abatido por un caza de las Fuerzas Aéreas ucranianas.
Sea como fuere, desde EEUU el vicepresidente Joe Biden confirmó anoche sus sospechas de que el avión estalló en el aire al ser alcanzado por un misil, aunque los servicios de inteligencia estadounidenses no han determinado todavía quién lanzó el ataque. También anunció que un equipo estadounidense será enviado a Ucrania para «colaborar» en la investigación, aunque la ex secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, asegura que es Europa quien debe liderar la respuesta en el caso del avión siniestrado.
Las autoridades de Ucrania han notificado el cierre del espacio aéreo en la parte este del país a la agencia europea para el control del tráfico aéreo, Eurocontrol; y tanto la Agencia Federal de Aviación (FAA) de EEUU como la Administración de la Aviación Civil de China (CAAC) han prohibido los vuelos sobre el espacio aéreo del este de Ucrania.
En otro ámbito, el presidente de EEUU, Barack Obama, mantuvo una conversación con su homólogo ruso, Vladimir Putin, tras la que el presidente ruso dijo que «la tragedia no habría tenido lugar si en esa tierra hubiera paz y si no se hubieran reanudado las acciones militares en el sudeste de Ucrania». Y en una conversación telefónica con el presidente ucraniano Petro Poroshenko, pidió que se preserven las evidencias en el lugar donde se estrelló el avión hasta que los expertos internacionales puedan investigar «todos los aspectos de la tragedia».
A este respecto, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha pedido una «exhaustiva y transparente» investigación; y ha convocado para hoy una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas después de que lo solicitase el primer ministro británico, David Cameron.
