Los Veintiocho logran un acuerdo sobre inmigración

La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente del Consejo, Donald Tusk, sonríen mientras el premier italiano, Giuseppe Conte, lee los términos del acuerdo (Foto: EC)
Los países miembros podrán crear de forma voluntaria centros de desembarco para los inmigrantes
Puede leer aquí el texto del acuerdo alcanzado en la primera jornada de Consejo Europeo
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea reunidos en Bruselas han llegado esta madrugada a un acuerdo sobre inmigración.
Tras más de trece horas de reunión, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk anunció a través de Twitter que «los líderes de los Veintiocho han acordado las conclusiones del Consejo Europeo, incluida la inmigración».
Durante la reunión Italia amenazó con bloquear las conclusiones y los países del Este plantearon reticencias. Pero al final, logrado el acuerdo en inmigración, los Veintiocho pudieron avanzar también en políticas de seguridad y defensa, la situación del comercio global tras los aranceles impuestos por Estados Unidos y el marco financiero plurianual para el periodo 2021-2027.
El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, celebró que «Italia ya no está sola» y se mostró satisfecho por haber alcanzado compromisos lo suficientemente satisfactorios para el país como para levantar el veto que había impuesto horas antes al resto de conclusiones de la cumbre. Conte destacó que en el pacto se señala que cualquier nave que surque el Mediterráneo debe respetar la ley y no interferir en las labores de la Guardia costera, así como enfocar de manera coordinada las operaciones de salvamento en el mar.
Así, en materia de inmigración, los líderes europeos apuestan por la creación «voluntaria» de centros cerrados de desembarco en sus respectivos territorios para separar a los refugiados -que tienen derecho a permanecer en la UE- de los inmigrantes ilegales por motivos económicos, que serán devueltos a sus países de origen.
El punto 3 del acuerdo señala: «Con respecto a la Ruta del Mediterráneo Central, los esfuerzos para detener a los contrabandistas que operan desde Libia o en cualquier otro lugar deben intensificarse aún más. La UE seguirá respaldando a Italia y otros Estados miembros de primera línea a este respecto. Aumentará su apoyo a la región del Sahel, la Guardia Costera de Libia, las comunidades costeras y del sur, las condiciones de recepción humanas, los retornos humanitarios voluntarios, la cooperación con otros países de origen y tránsito, así como el reasentamiento voluntario. Todos los buques que operan en el Mediterráneo deben respetar las leyes aplicables y no obstruir las operaciones del guardacostas libio».
El punto 4 se refiere a la Ruta del Mediterráneo Oriental, donde «se requieren esfuerzos adicionales para aplicar plenamente la Declaración UE-Turquía, evitar nuevos cruces desde Turquía y detener los flujos. El acuerdo de readmisión UE-Turquía y los acuerdos bilaterales de readmisión deben aplicarse plenamente de manera no discriminatoria hacia todos los Estados miembros. Se necesitan más esfuerzos urgentemente para garantizar retornos rápidos y prevenir el desarrollo de nuevas rutas marítimas o terrestres. La cooperación y el apoyo a los socios de la región de los Balcanes Occidentales siguen siendo fundamentales para intercambiar información sobre los flujos migratorios, prevenir la migración ilegal, aumentar la capacidad de protección fronteriza y mejorar los procedimientos de retorno y readmisión».
En cuanto al reciente aumento de los flujos migratorios en el Mediterráneo occidental, «la UE apoyará, financieramente o no, todos los esfuerzos de los Estados miembros, especialmente España, y los países de origen y tránsito, en particular Marruecos, para prevenir la migración ilegal».
Este último punto fue resaltado por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien confirmó que el Consejo Europeo se ha comprometido a destinar más recursos económicos a España para ayudar a hacer frente a los flujos migratorios en el Mediterráneo. «Nos podemos dar francamente por satisfechos. Hemos conseguido cosas muy positivas para el país y, a nivel europeo, seguimos caminando en esa respuesta común», dijo Sánchez.
Sobre el compromiso de aumentar los recursos para países de tránsito de migrantes como Marruecos, el jefe del Ejecutivo español afirmó que «no es el mejor de los acuerdos, pero es un acuerdo importante que camina en la dirección de continuar dando una perspectiva europea a un desafío europeo como la migración».
Preguntado sobre si España asumirá puntos de desembarco de inmigrantes, explicó que ya cuenta con ellos (los CIE), así como con un dispositivo «perfectamente instrumentado» del que forman parte Salvamento Marítimo, la Guardia Civil, convenios con ONG, y centros de atención a asilados e inmigrantes. «Creo que lo importante es que se vuelquen recursos económicos para ayudar a la respuesta que da España al fenómeno de la migración en nuestro país», señaló.
El presidente francés, Emmanuel Macron, celebró haber logrado «una solución europea y un trabajo en cooperación». Según explicó en una intervención sin preguntas tras la reunión, el acuerdo establece «la voluntad de proteger mejor» las fronteras y de «reforzar las reglas de acogida», a través de «centros controlados en suelo europeo» para organizar la acogida. Además acordaron «trabajar con países terceros, y en particular con África y Oriente Medio a partir de la propuesta de ACNUR y la Organización Internacional de las Migraciones».
Por su parte, la canciller alemana, Angela Merkel, consideró que es un «buen mensaje» que los jefes de Estado y Gobierno hayan aprobado un texto consensuado en materia de asilo político.
Por último, el Consejo acordó prolongar seis meses más las sanciones económicas a Rusia por su papel en la crisis separatista en el este de Ucrania (el derribo del avión MH17 en el este de Ucrania en 2014) y por no haber aplicado suficientemente los acuerdos de paz de Minsk.