Así se benefician los delincuentes con la pandemia

Las mascarillas son el producto más falsificado del mundo en estos momentos (Europol)
Productos falsos o «pruebas del corona» son ofrecidos por los delincuentes a través de la red aprovechando el aumento del teletrabajo y el consumo de internet
En España la Policía ha detectado en los últimos días el registro de 12.000 nuevos dominios web relacionados con el coronavirus
El número de ataques cibernéticos ha aumentado de forma significativa con la crisis mundial provocada por el coronavirus chino.
Y se espera que aumente pues los delincuentes no descansan y utilizan las actuales circunstancias -alta demanda de equipos de protección y productos farmacéuticos; más consumo de internet y conexiones por el teletrabajo y el confinamiento- para atacar con malware, robar y defraudar.
La Europol, la Policía europea dirigida por Catherine De Bolle, informó hace pocos días de que el Hospital Universitario de Brno (República Checa) sufrió un ataque cibernético que obligó al hospital a cerrar toda su red TI, posponer intervenciones quirúrgicas urgentes y redirigir a los pacientes graves a un hospital cercano.
El fraude telefónico y las estafas en el suministro de energía y de productos sanitarios y farmacéuticos también han aumentado. Lo sabemos bien en España, donde el Ministerio de Sanidad ha comprado test rápidos del covid-19 inservibles. Actualmente hay abierta una investigación centrada en la transferencia de 6,6 millones de euros a una compañía de Singapur que prometió geles de alcohol y máscaras FFP3 / 2 que nunca llegaron a sus compradores.
Entre el 3 y el 10 de marzo, policías de todo el mundo confiscaron más de 34.000 máscaras quirúrgicas falsificadas (el producto médico más vendido en línea), en una operación -Pangea- en la que intervinieron agentes de 90 países que identificaron más de 2.000 enlaces a productos relacionados con el coronavirus.
La macro operación policial reveló un aumento preocupante de medicamentos antivirales no autorizados y cloroquina antipalúdica; de vitamina C, conocida por sus propiedades inmunoestimulantes, y otros complementos alimenticios, así como los analgésicos y antibióticos de dudosa procedencia.
La operación Pangea acabó con 121 detenidos, 13 millones de euros incautados en productos farmacéuticos peligrosos; 4,4 millones de productos farmacéuticos ilícitos; 37.000 dispositivos médicos no autorizados y falsificados incautados (en su mayoría máscaras quirúrgicas y kits de autoevaluación para el control del VIH y la glucosa); 2.500 sitios web, redes sociales, mercados en línea y anuncios eliminados y 37 organizaciones criminales desmanteladas.
Los delincuentes también han suplantado a autoridades públicas o personal médico para entrar en casas y comercios. Varios Estados miembros de la UE han informado acerca de un modus operandi que consiste en ofrecer productos de higiene o una «prueba de corona».
En España la Policía Nacional ha detectado en los últimos días el registro de forma casi simultánea de 12.000 nuevos dominios web relacionados con el coronavirus creados, con toda probabilidad, para cometer fraudes con la compra de falsos productos milagrosos que curan la enfermedad, como falsas vacunas anti Covid-19.
Lo ha desvelado el director adjunto operativo (DAO) de la Policía Nacional, José Ángel González, en la rueda de prensa diaria del Comité Técnico de Gestión del Coronavirus, en la que ha detallado que «la verdadera intención de estos ciberdelincuentes es obtener los datos bancarios y personales»