Santamaría dice que hay que ser responsable cuando se habla de rescate
«Lo último que tocaría este Gobierno serían las pensiones»
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado hoy que el Ejecutivo decidirá si pide o no ayuda a la Unión Europea «cuando tenga las cosas atadas y bien atadas porque», ha considerado, «no sería «responsable tomar una decisión a bote pronto y sin saber las consecuencias».
Sáenz de Santamaría ha señalado que la Unión Europea tiene que reconocer que en España se están haciendo cambios y que los españoles están haciendo muchos sacrificios.
También ha querido salir al paso, durante su entrevista en Telecinco, de unas declaraciones que el vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, realizó ayer. Según Almunia, retrasar la decisión del rescate conlleva riesgos, a lo que Santamaría ha contrapuesto que «su opinión no coincide con la de otros comisarios europeos». «No estamos aquí para opinar sino para tomar decisiones fundadas», ha remarcado.
Al ser preguntada por la entrevista que ayer concedió Alfredo Pérez Rubalcaba a TVE y durante la que aseguró que él no pediría el rescate porque perjudicaría a la marca España y conllevaría más recortes sociales, Sáenz de Santamaría ha recordado que el líder del PSOE «ocupaba la vicepresidencia del Gobierno hace un año y tiene una gran responsabilidad en relación con las altas cifras de déficit y deuda pública dejadas», a pesar de que el propio Rubalcaba dijese que «Rajoy conocía las cifras de déficit de las CCAA porque era el Partido Popular quien las gobernaba».
Sáenz de Santamaría ha querido dejar claro que «muchas de las cosas que ahora critica el líder socialista las hizo el PSOE durante los gobiernos de Rodríguez Zapatero«.
La vicepresidenta del Gobierno no ha pasado por alto la deriva independentista de Artur Mas en Cataluña. La vicepresidenta del Gobierno ha calificado como «muy llamativo el cambio de discurso del Gobierno catalán» y ha recordado que hasta el PNV le ha recordado que la crisis económica es la prioridad, en referencia a unas declaraciones de Iñigo Urkullu en las que asegura que su prioridad ahora «es la crisis y que la secesión es una palabra demasiado grande».