Piden a UGT que no se sume a la marcha secesionista del 15 de abril
Álvarez (UGT) y Rosiñol (SCC) se saludan esta mañana en la sede del sindicato
El presidente de Societat Civil Catalana, José Rosiñol, se ha reunido este jueves con el secretario general de UGT, Josep Maria Álvarez
El presidente de Societat Civil Catalana (SCC), José Rosiñol se ha reunido este jueves con el secretario general de UGT, Josep Maria Álvarez, para mostrarle su malestar por la participación del sindicato en la manifestación secesionista convocada por ANC y Òmnium Cultural contra el encarcelamiento de los líderes independentistas.
Rosiñol ha dejado claro a Álvarez que la marcha que se va a celebrar en Barcelona este próximo domingo 15 de abril es «una cortina de humo para tapar las vergüenzas del independentismo».
El presidente de la asociación, que ha estado acompañado por Miriam Tey, Álex Ramos y Manuel Gómez Acosta, ha dejado claro al líder sindical que las entidades secesionistas son partidarias de actuar al margen de la ley y de forma unilateral y, por tanto, ha señalado, «esta iniciativa no contribuye a la creación de marcos de convivencia».
La petición de Rosiñol debe de haberle entrado a Álvarez por un sitio y salido por otro ya que hace unos días tanto UGT como Comisiones Obreras (CCOO) emitieron un comunicado conjunto en el que califican las actuaciones de los jueces que instruyen las causas por rebelión y sedición contra los directores del ‘procés’ de «desproporcionadas». Según os sindicalistas, tanto Pablo Llanera (TS) como Carmen Lamela (AN) «abusan de la prisión preventiva».
Las filiales catalanas de UGT y CCOO apoyan sin fisuras a los partidos secesionistas y hablan, al igual que los independentistas, de «presos políticos» o «exiliados». Incluso han presentado junto a ANC y Òmnium Cultural la plataforma Espacio Democracia y Convivencia para, entre otras cosas, pedir «la liberación de los presos políticos» y una respuesta «política» a la situación en Cataluña. Mientras, en Madrid, las direcciones de las centrales sindicales denuncian que en España se está produciendo un «retroceso de libertades», aunque afirman que eso no puede «en ningún caso puede confundirse con su apoyo al procés».
En este contexto, lo único que ha logrado Rosiñol es que el secretario general de UGT se haya mostrado a favor de que el sindicato participe en futuras manifestaciones convocadas por Societat Civil Catalana, siempre que la finalidad sea fomentar la convivencia y la concordia en Cataluña.
Rosiñol ha valorado el ofrecimiento de Álvarez y le ha expresado que SCC le tenderá la mano siempre que el sindicato sea partidario de crear espacios de diálogo respetando la Constitución, el Estatut de Catalunya y todo el marco legal.
Por último le ha recordado que el futuro de Cataluña pasa por «acabar con la fractura social» y que manifestaciones como la del próximo domingo agravan más el problema actual porque lo único que generan es más división y odio entre los catalanes.
