Los transportistas rechazan la transición energética propuesta

Llenar el depósito del camión sería más caro (Fenadismer)
La Comisión de expertos propone subir un 28,6% el gasóleo y un 5,8% el gas para abaratar la luz un 6,8%
La comisión de expertos a la que el Gobierno encargó estudiar cómo hacer la transición energética para cumplir los compromisos de París propone cambiar los impuestos actuales por otros que graven los daños medioambientales para que «quien contamine pague».
En concreto, los expertos apuestan por encarecer el gas un 5,8% y también los derivados del petróleo, especialmente el gasóleo, que subiría un 28,6%. Para la gasolina apuestan subirla un 1,8%. Abogan, además, por el establecimiento de una tasa (viñeta) por la utilización de la actual red de autovías españolas. Todo para abaratar el precio de la electricidad en un 6,8% para el consumidor doméstico.
Según el informe, del que puede leer aquí un resumen, las alzas de los combustibles fósiles «son coherentes con la necesidad de electrificar la economía para avanzar hacia la descarbonización y son alcanzables a medio plazo de forma gradual». Además, sería necesario subir el IVA de todos los productos, lo que llevaría el tipo general del 21% actual hasta el 22,3%.
Recomiendan considerar la extensión de la protección a los consumidores vulnerables al conjunto de suministros energéticos de los hogares, a través de un bono social energético, pero financiado desde los Presupuestos Generales del Estado.
El documento propone también en materia fiscal sacar de la factura eléctrica los sobrecostes de las renovables y repartirlos entre todas las energías. También propone que todos los vectores energéticos financien las infraestructuras necesarias para satisfacer el consumo energético.
La comisión de expertos da por seguro que da aquí a 2030 el carbón desaparecerá del llamado mix eléctrico. El informe apunta a que el gas natural jugará un papel importante hasta 2030, pero su importancia se reducirá en 2050, año en el que la generación eléctrica girará exclusivamente en torno a instalaciones eólicas, hidráulicas, fotovoltaicas y el almacenamiento. El grupo de expertos es partidario de ampliar en diez años, de 40 a 50, la vida de las centrales nucleares. Esta medida evitaría que se dupliquen las emisiones de CO2 y que el precio de la electricidad se elevara en torno a un 20%, entre 2.000 y 3.000 millones al año.
A pesar de que los expertos apuestan por aplicar «rebajas» a los agricultores y los profesionales del transporte, la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer) rechaza «de forma rotunda» la subida que proponen en los impuestos a los carburantes, que califica de «brutal».
Fenadismer acusa a los expertos de desconocer la realidad del sector del transporte por carretera tanto en materia de contribución al medio ambiente, en la que la tecnología actual de los camiones han reducido en más de un 90% los contaminantes emitidos a la atmósfera, como en materia fiscal, en la que el sector contribuye con casi el 50% del total de impuestos indirectos que recauda la Hacienda española, en concreto más de 12.000 millones de euros anuales. Añaden que los nuevos impuestos contrastan con los beneficios fiscales de los que disfruta el transporte aéreo, marítimo y ferroviario que gozan de una exención total de impuestos sobre los carburantes que consumen.
Los transportistas consideran que dicha medida traería como consecuencia inmediata romper con la tendencia de crecimiento positivo continuado de las exportaciones españolas, que se ha mantenido a lo largo de estos últimos 3 años, y agravaría el desequilibrio del déficit comercial español entre las exportaciones y las importaciones, que según datos del Ministerio de Economía se incrementó en un 40% en el último año, con lo que en consecuencia ralentizaría el proceso de recuperación de la economía española.
El Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital es partidario de avanzar «de forma gradual» y con el mayor consenso social y político en la imposición medioambiental, aunque considera que los objetivos planteados en su informe por el grupo de expertos sobre transición energética son «muy ambiciosos».
Fuentes del Ministerio, citadas por las agencias, han explicado que lo lógico es avanzar gradualmente en la aplicación de impuestos medioambientales para equiparar a España con otros países europeos, pero subrayan que las propuestas del grupo de sabios tienen «implicaciones de todo tipo» que «hay que calibrar con cuidado».