La brecha digital de género se reduce a 1 punto en España

Esquema de los itinerarios profesionales que pueden desarrollarse dentro del ecosistema digital, según Igualdad
La diferencia estaba en 8,1 puntos
Aunque las mujeres mantienen una posición desfavorable en competencias digitales y usos de Internet
La brecha digital de género se ha reducido progresivamente en España, pasando de 8,1 a 1 punto.
A pesar de todo, las mujeres mantienen una posición desfavorable en competencias digitales y usos de Internet.
Son algunos de los principales datos de los dos informes sobre la brecha digital de género –Mujeres y digitalización: de las brechas digitales a los algoritmos y Las mujeres en la economía digital española: Trayectorias inspiradoras- publicadospor el Instituto de la Mujer en colaboración con el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI).
Entre los datos más reveladores obtenidos por los autores de los estudios también destacan:
En competencias avanzadas, como programación, la brecha en España es de 6,8 puntos, siendo la media de la UE de 8 puntos.
El porcentaje de investigadoras en el sector de servicios TIC se reduce al 23,4%.
En cuanto al porcentaje de graduados/as en STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas), España se sitúa en la posición 12 dentro de la UE, con una diferencia entre sexos de 17 puntos.
La brecha simbólica destaca datos como que solo un 6% de quienes han realizado más de 500 ediciones en Wikipedia son mujeres.
En cuanto al empleo, sólo un 2% de las mujeres ocupadas lo están en el sector TIC, frente al 5,7% de los hombres.
Por otra parte, sólo un 8% de las mujeres ocupan puestos técnicos y especializados y que solo representan el 22% del total de candidaturas presentadas a las ofertas de trabajo ligadas al sector digital.
En lo que respecta al salario, los hombres cobran un 8,9% más que las mujeres en su misma posición en este sector.
En cuanto a iniciativa empresarial, apenas representan el 17% en la creación de start-ups.
Según el Fondo Monetario Internacional (informe Brussevich, 2018) el 11% de los puestos de trabajo ocupados por mujeres están en alto riesgo de automatización, frente al 9% de los ocupados por hombres.
En participación en el diseño y aplicaciónTIC, sólo un 12% de quienes participan en el desarrollo de innovaciones ligadas a la inteligencia artificial y el Machine Learning con capacidad de decisión de alto nivel son mujeres. Igualmente, solo representan el 11% de las personas que programan código fuente (escribir software).
Menos del 25% del personal investigador en inteligencia artificial en instituciones y organizaciones académicas son mujeres.
Todos estos datos tienen una explicación educativa, como se encarga de apuntar el primero de los informes publicados por el Ministerio de Igualdad dirigido por Irene Montero. Las últimas investigaciones realizadas en España alertan sobre la falta de vocaciones STEM entre las jóvenes de educación secundaria (Digitales, 2019; Sáinz, 2017).
De hecho, los datos sobre participación de mujeres en estudios universitarios STEM reflejan importantes brechas de género en el tipo de estudios que eligen las mujeres.
Según el Ministerio de Educación (2019) durante el curso académico 2017-2018 las mujeres eran mayoría en los estudios de Biomedicina (75,92%), Medicina (66,42%), Biología (61,80%), y Química (52,24%). Sin embargo, y con respecto a ciencias, había muy pocas mujeres matriculadas en estudios de Física (25,31%) y Matemáticas (37,71%).
De igual modo, había un porcentaje elevado de mujeres en el ámbito de la Arquitectura (49,13%), pero había pocas mujeres matriculadas en Ingeniería de Telecomunicaciones (20,49%), Informática (12,04%), Ingeniería Electrónica (16,51%), Ingeniería Eléctrica (13,76%) e Ingeniería Aeronáutica (13,06%).
Curiosamente, Ingeniería Química Industrial (46,12%) e Ingeniería Biomédica (59,10%) son las únicas titulaciones de ingeniería que presentaban una presencia más equiparada de hombres y mujeres.
Estos datos muestran a las claras los intereses diferentes de la juventud de uno y otro sexo en estos ámbitos tan relacionados con la innovación y la digitalización. Las chicas se sienten más atraídas por todo lo relacionado con la vida y la salud, mientras que los chicos son más propensos a ciencias puras e ingenierías tradicionales.
Lo anterior resulta previsible cuando se consideran las evidencias de la educación secundaria post-obligatoria que ofrece el Ministerio de Educación (2019) y en las que se aprecia la conformación de la brecha de género en la elección de estudios y materias por parte de chicos y chicas en estas edades.
Por una parte, las chicas eligen en mayor medida que los chicos las asignaturas e itinerarios ligados a los Bachilleratos de Humanidades y Ciencias Sociales (50,7% de chicas frente al 44,2% de chicos) y de Artes (6,6% de chicas frente a 3,7% de chicos). Los chicos, por su parte, eligen en mayor medida el Bachillerato de Ciencia y Tecnología (51,2% de chicos frente al 42,7% de chicas) (MEFP, 2019).
Asimismo, y al igual que hemos observado en el caso de los estudios universitarios STEM, las chicas durante el curso académico 2016-2017 eligieron en mucha menor medida los estudios de formación profesional de grado medio y superior relacionados con la tecnología, tales como la Informática (8% en el ciclo medio y 11,7% en el ciclo superior), Mantenimiento y Servicios a la Producción (2,1% en el ciclo medio y 14,4% en el ciclo superior), Mantenimiento de Vehículos Autopropulsados (2,4% en el grado medio y 2,8% en el superior) y Edificación y Obra Civil (20,1% en grado medio y 31% en el grado superior).
Las mujeres eran mayoría en los módulos de grado medio y superior relacionados con la Sanidad (72,3% en el grado medio y 73,7% en el grado superior), pero también con los relacionados con Servicios Socioculturales y a la Comunidad (85,9% en el ciclo medio y 87,3% en el ciclo superior), la Imagen Personal (91,2% en el ciclo medio y 94,3% en el ciclo superior), Hostelería y Turismo (37,8% en el ciclo medio y 56,3% en el ciclo superior) y Administración (60,5% en el ciclo medio y 63,3% en el ciclo superior).
Este patrón de subrepresentación de mujeres en ámbitos STEM tecnológicos no es exclusivo del contexto español, sino que se puede también observar en otros países europeos y occidentales (Koch, Polnich, y Irby, 2014; OCDE, 2018; UNESCO, 2018).
Según el dossier de indicadores del Índice de Desarrollo Digital de las Mujeres en España y Europa (ONTSI, 2019a), España se sitúa en una posición media alta (lo que se traduce en el puesto 12) en cuanto a porcentaje de graduados en disciplinas STEM. Sin embargo, llaman la atención los 17 puntos porcentuales de diferencia entre hombres y mujeres, siendo los hombres los que mayor grado de participación tienen entre los graduados de carreras STEM.