Cae una red que «fusilaba» música en la SGAE

Sede de la SGAE en Madrid
Un grupo de autores y editores generaban derechos de autor falsos
Se están realizando detenciones y registros en varias provincias españolas
Creaban música de baja calidad y hacían falsos arreglos en canciones conocidas que emitían en programas nocturnos de televisión para generar un enriquecimiento injusto a través del pago de derechos de propiedad intelectual realizado por la SGAE
La Policía Nacional están desarrollando en varias provincias españolas una operación contra un entramado de autores y editores por corrupción entre particulares.
Los investigados -empleados de la SGAE- creaban música de baja calidad y hacían falsos arreglos sobre obras musicales de dominio público para, posteriormente, titularizarlas a nombre de testaferros y empresas editoriales. Éstos las emitían en programas nocturnos de televisión de distintas cadenas, durante la madrugada, generando derechos de propiedad intelectual.
Los investigados, para conseguir esas emisiones, contaban con «colaboradores» que trabajaban en esas televisiones y que, a modo de intermediarios, favorecían las emisiones en las cadenas de televisión en las que trabajan a cambio de porcentajes de derechos sobre las obras emitidas en unos casos o contraprestaciones económicas por su labor.
Esta cesión de derechos de obras musicales «falsas» y de baja calidad a las cadenas de televisión convierte a las televisiones en titulares de derechos de propiedad intelectual de las obras que les son cedidas, generándoles un beneficio económico, -denominado «retorno»-, en función de los minutos y franjas horarias en las que son emitidas en sus programaciones y que es abonado por la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en sus liquidaciones semestrales.
Ese grupo de autores y editores, entre los que se encuentran determinadas televisiones, se enriquecen de manera injusta debido a la formalización de tales contratos de cesión de derechos con los intermediarios de las cadenas de televisión y sus editoriales; lo que perjudica gravemente al resto de autores, que no pueden emitir su música sin prestarse a la cesión de derechos de sus obras.
Determinadas televisiones, para maximizar las ganancias que pueden obtener en concepto de «retorno» por parte de la SGAE, están programando la música que les sale «rentable» en franjas horarias del denominado prime time bajo la fórmula de lo que se viene a denominar «música inaudible», es decir, la emisión de tales obras como un fondo musical que no es percibido por el oído del televidente en ningún momento, si bien es declarado como música emitida para generar derechos de autor.