Lasquetty prevé una caída del PIB madrileño superior al 10%

El consejero de Hacienda madrileño, Javier Fernández-Lasquetty
Según un estudio elaborado por la Consejería de Hacienda y Función Pública de la Comunidad de Madrid
El escenario más optimista sitúa la caída del PIB en el 7,8% mientras que un posible nuevo cierre de la economía elevaría el desplome al 18,7%
El Gobierno de la Comunidad de Madrid prevé una caída del Producto Interior Bruto (PIB) regional de entre el 10,1% y el 12,7% como consecuencia de los efectos provocados por la crisis causada por el virus de Wuhan.
Así lo refleja un estudio elaborado por la Consejería de Hacienda y Función Pública que ha utilizado, entre otros parámetros, los últimos datos de la Contabilidad Nacional Trimestral del Instituto Nacional de Estadística (INE), así como los de paro y afiliación a la Seguridad Social.
Los técnicos de la Consejería dirigida por Javier Fernández-Lasquetty han llevado a cabo una estimación del impacto de la crisis causada por el covid-19 basándose en cuatro hipotéticos escenarios.
El escenario más optimista situaría la caída del PIB en el 7,84%. Se produciría una reapertura acelerada de la actividad productiva en la región gracias a las medidas adoptadas por el Ejecutivo autonómico.
No obstante, los analistas se decantan por una evolución más paulatina que no se completaría en gran parte hasta el mes de septiembre en el caso de la hostelería y el turismo. En este caso, la caída del PIB sería del 10,1% y la recuperación se retrasaría hasta la segunda parte de 2021.
Por su parte, la caída del PIB alcanzaría el 12,7% y la recuperación se iría a más de año y medio en el caso de que la situación se asemeje al escenario 3 del estudio. Un escenario que estaría marcado por el cierre de numerosas empresas, especialmente de los sectores de la hostelería, el turismo, el ocio y el comercio.
Por último, el análisis de la Consejería de Hacienda y Función Pública establece un cuarto y último escenario, que implicaría una caída del PIB del 18,7% y una recuperación muy lenta mucho más allá del año y medio en el que se situaba el escenario 3.
Este escenario estaría marcado por un nuevo cierre productivo en otoño fruto de algún tipo de rebrote. Esta es la previsión más pesimista que haría necesario aplicar medidas muy drásticas y dependiendo completamente de la Unión Europea en el corto plazo.
Para reactivar la economía regional, el Gobierno de Ayuso ha puesto sobre la mesa un plan de reactivación económica con 30 medidas específicas enfocadas para aportar flexibilidad a las empresas, para favorecer el emprendimiento así como para garantizar la continuidad del tejido productivo.
El objetivo es impulsar iniciativas que incentiven y faciliten la inversión eliminando al mismo tiempo trabas administrativas y burocráticas. Todo ello combinado con un apoyo y respaldo a aquellos sectores y trabajadores que han sido más perjudicados por los efectos de la crisis del COVID-19, como el turismo o el sector inmobiliario.